sábado, 26 de febrero de 2011

RAICES DE MUJER

Siempre es bueno recordar que las mujeres ante la discriminación, respondemos con proyectos de cultura en libertad, ante la invisibilidad, abrimos canales de comunicación social, y ante la violencia normalizada, plantamos cara con dignidad. Por ello hice este artículo, que hoy me han pedido que vuelva a compartirlo. Espero que os guste.

Cada 8 de marzo celebramos el Día Internacional de la Mujer. Así recordamos a las mujeres que han luchado por nuestros derechos humanos a través de los años. El origen de la fecha a veces se pierde en la memoria y es bueno siempre honrar a las que dieron origen a esta conmemoración.

¿Por qué conmemoramos un día de la mujer? La historiadora Ana Isabel Álvarez González ha estudiado las historias en torno a este día y asegura que su origen fue la promoción de la lucha por el derecho al voto de la mujer, sin restricciones. Las socialistas estadounidenses llevaban celebrando el Día de la Mujer desde 1908. Sin embargo es Clara Zetkin la que lo eleva a la categoría de internacional cuando en la II Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas, celebrada en Copenhague en el 1910, solicitó se reconociera el Día Internacional de la Mujer, y con ello logró se le diera el impulso más importante a dicha celebración, impulso que llega a nuestros días.

Cuando se celebró el primer Día Internacional de la Mujer en 1911, más de un millón de mujeres participó públicamente en él. Además del derecho a voto y a ocupar cargos públicos, demandaban el derecho a trabajar, a la enseñanza vocacional y el fin de la discriminación en el trabajo.

Muchas veces hemos contado historias del 8 de marzo, algunas tienen raíces en sucesos históricos otras se han ido construyendo con el tiempo. Ciertamente como hemos dicho por años al comienzo del siglo XX las trabajadoras de la industria textil en el área del Bajo Manhattan de Nueva York padecían condiciones de trabajo inhumanos y se destacaron por sus luchas a favor de mejores condiciones de empleo.

En ese contexto se llevaron manifestaciones multitudinarias para exigir mejores condiciones de empleo y de salario, la reducción de la jornada laboral, la eliminación del trabajo infantil y el derecho al sufragio para las mujeres.

Muchas veces también hemos dicho que hubo una manifestación un 8 de marzo, en el año de 1857 y luego otra un 8 de marzo de 1908, la certeza de esto está en controversia. En esta época las personas que se empleaban en la industria textil, sobre todo mujeres y niñas(os) lo hacían en condiciones infrahumanas. No sólo trabajaban largas jornadas de diez o doce horas, sino que también no había luz ni ventilación adecuadas.

Posteriormente en el 1911 ocurrió el famoso fuego de la fábrica Triangle donde murieron obreras atrapadas en el edificio..El año antes del fuego , en el 1910 ya se había propuesto la celebración de un día para recordar a todas las mujeres que desde el siglo XIX habían estado luchando por el reconocimiento de sus derechos, sobre todo por el derecho al voto, mediante la conmemoración de un Día Internacional de la Mujer.

En el mundo entero se conmemora el Día Internacional de la Mujer después de que la Organización de las Naciones Unidas en el 1975 reconociera en las luchas de aquellas mujeres de principio de siglo todas las luchas de las mujeres de todo el mundo que aún luchamos no sólo por mejores condiciones de trabajo sino por el reconocimiento de todos nuestros derechos como seres humanos.

Cada vez más esta fecha se invisibiliza dentro de todos los festejos y ceremonias que se realizan, sobre todo desde que se hace una semana de celebración. Esto tiene el efecto de prácticamente dejar sin importancia el 8 de marzo como la fecha clave de toda la semana. El 8 de marzo no es una fecha para felicitaciones es una fecha para recordar y conmemorar las luchas, esfuerzos y la historia de nosotras las mujeres por mejorar y adelantar nuestros derechos en la sociedad.

Los cambios legales deben ir de la mano con los cambios en actitudes sociales y personales. Cada día 8 de marzo reconocemos esto y a la vez recordamos las luchas por los derechos y la equidad de todas nosotras, llevada a cabo por tantas mujeres a lo largo de estos años y siglos. Al solicitar el reconocimiento del Día Internacional de la mujer en el 1910 se hizo un llamamiento a las mujeres para unir sus luchas por la igualdad de derechos con la lucha por preservar la paz mundial.


La mujer nace libre y debe permanecer igual al hombre en derechos y estos derechos son entre otros, la libertad, la propiedad, la seguridad y, sobre todo, la resistencia a la opresión. Por todo ello, en estos días cada 8 de marzo, es un compromiso de hombres y mujeres en la búsqueda de una sociedad de paz y de más justicia para todas y todos.

sábado, 5 de febrero de 2011

UN GRITO DE ESPERANZA

Participación activa de las mujeres en la lucha.

Las mujeres, en su lucha por la igualdad, están cambiando su relación con el mundo y consigo mismas, vaya como ejemplo lo que estos últimos días está ocurriendo en Egipto.
La tensión y la violencia vividas en los últimos días, entre los partidarios y opositores al presidente Mubarak., no ha conseguido disuadir a las mujeres de tomar las calles,
con un ejemplo de valentía y superación, las mujeres egipcias  han conseguido convertirse en las protagonistas de estas manifestaciones, una nueva generación de mujeres, que expresa sus sentimientos en internet y son bien recibidas en los movimientos de protesta,  mujeres de todos los estratos, conservadoras y liberales, cubiertas con velo islámico o con el pelo al aire.
Con pancartas y megáfonos, las mujeres rompen con los silencios y prejuicios vigentes en su sociedad, con un nuevo grito de  esperanza:“Vamos a cambiar el sistema, queremos libertad”. “Las mujeres tomamos parte en esta revolución, y queremos tener voz en los asuntos de Egipto”. Esta confianza es compartida por muchas mujeres, que no ocultan su propia sorpresa ante la masiva participación femenina, algo novedoso en una sociedad conservadora y patriarcal en la que la mujer juega por lo general un rol secundario.
Muchos lo han resumido así: “Lo que pasa estos días en las calles es impresionante”. Es extraordinario ver mujeres manifestándose al lado de los hombres y mujeres durmiendo en la plaza Tahrir”.
Hoy las protestas continúan tras el esperado día de la salida, pero  lo que ha quedado claro es el gran paso en los derechos de la mujer egipcia y cómo se han roto barreras culturales, que hasta ahora parecían imposibles de traspasar.
 Vaya mi homenaje a tod@s ellas, recordando una frase de Gustavo Lebon;  "La fuerza jamás oprime una idea durante mucho tiempo, pues una idea oprimida no tarda en ser generadora de fuerza"